Brooken Shaden
El día se hunde en el
mojado horizonte
como tu mano en vilo
resbala hasta
alcanzar el fondo de mi abismo
el cielo ligeramente
ambarino permanece por instantes expectante
se injerta la
hermosura cuando la etérea luz vagabundea sobre las flores
suspiros se escucha
cuando el sol sin premura desciende
la sombría tela ahora
reposa sin vida
pues el atrevido
céfiro de la piel se adueña…
Luna de verano al sol
le confiesa su amor
deambula la música
entre el rojo y el amarillo
el azul ya no se
divisa en el cielo
ahora me mira con
deseo
la vida quiere volver
a su cuna
se encorva la espalda
cuando los dedos
declaman poesía…
El tiempo insiste volver
a su vertiginoso ritmo
pero este parece
detenerse
cuando los cuerpos se
entrelazan
el latido golpea las
tinieblas
se asfixia el poema
la aurora se acerca
brama el río en los
tupidos bosques
el alma apunta mas
allá de las estrellas
cuando ángeles y
demonios
vuelan en éxtasis
sobre las sabanas…
Xiomara Beatriz