miércoles, agosto 20

El fallecido.



                                           Harding Meyer                                                

Hace poco abandoné mi silencio

me deje llevar por la fascinación 

de sus enigmáticas letras.


¡Ay de mí!  Aún tiemblo a enterarme 

luego que hablaba con un fallecido 

un manantial de llanto inundó mis ojos

con una lúgubre vestimenta he venido

a honrarlo.


Y me topo con la sarcástica mirada 

envuelta en la arrolladora gracia 

de tus escandalosas carcajadas 

del villano de siempre

que la muerte aún no

ha podido callar.


Xiomara Beatriz.

No hay comentarios: