Me gusta
ver el revés de un bordado
el misterio de la sombra
cuando la luz la atraviesa
la estereofonía del ambiente
la belleza del decorado de la existencia
a pesar de las inmundicias que el egoísmo exhala
el bostezo continuo de las sombras ante la aurora
que se cuela traviesa entre las cortinas
que se cuela traviesa entre las cortinas
atónita de que alguien este aun sobre el lecho...
Me gusta
el agua que suena en las canalejas
cuando plácidamente llueve
cuando plácidamente llueve
el atavío respirando pausa
perezoso sobre una butaca
perezoso sobre una butaca
el codo sereno sobre el escritorio
ante el ímpetu de los dedos
que teclean poesías...
Me gusta
tu mano en silencio
debajo del mentón mientras me lees
la sangre que me habita con su música
dándole poderío a cada latido
en el sueño que comparto contigo ...
Me gusta
la lámpara que auxilia en la esquina una fotografía
lo que murmuran las esquinas de cada estrella
la meditación de las hojas bajo el susurro del viento
la medalla de Ra que siempre cargo sobre mi pecho
el aroma arrebatado de tus poemas de pasión
mientras el crepúsculo marchita el día
con agónica majestuosidad de colores
cuando te vuelvo a leer...
Me gusta
el narcótico hechizo
con que se embadurnan mis pinceles
ante el grito del lienzo desnudo
reclamando su húmeda presencia
para vestirse de los ecos de la existencia
despertando así emociones
en los corazones...
Me gustan
esas sencillas cosas
sin fanfarrias extrañas
que me hacen maravillar
en esta vertiginosa danza
que llamamos vida...
Xiomara Beatriz