domingo, enero 1

Bordando sueños...








Escribo para mi misma
mientras el aullido del lobo todo lo inunda...

El dorado sol tiembla su agonía
en el teñido catre de mil colores...

La luna se adorna de diademas de estrellas
mientras la luz mengua...

El viento se esconde en el arbusto
presintiendo el vocablo...

La voz de las letras corroe con su sed
el lienzo...

Alucinado el silencio huye despavorido
ante su acústica...

La noche embellecida de versos
al otro lado de la ventana sonríe...

Canta su embriaguez la pluma
con su mar de ébano...

En ese vaivén viaja sedienta
el alma...

El sutil aliento de la lámpara
conmovido observa...

Se comienza a bordar el sueño…


Xiomara Beatriz

martes, diciembre 27

Nuestra Navidad...



Resuena bajo el vetusto árbol una balada de invierno
el gélido viento como ola invisible va levantando las cortinas
el tiempo del presente me saquea con alas de arcángeles
tiembla el corazón ante el conjuro del destino
en una galería de letras como alondras de brioso aleteo
viajabas al igual que yo en los sueños
en tu irreal sombra me fije
en los nubarrones que coronaban tu incorpórea faz
tus ojos desiertos de dulces melodías
la noche solitaria que deseabas para siempre abrazar
y
tuve curiosidad



Mi alma iba marcando el sendero en el transido poema
para poder regresar de la trovadora ciénaga
carcajada de niño como soplo luminoso
entre el babel de versos escuche
desnudando el cielo de un insólito mundo
el sol en su radiante cuna me sonrió
cantaba sus sueños locos con voz de tenor
la gravosa carga dejaste olvidada
para correr tras mis pies descalzos
decorada de travesuras fueron tus sonrisas
éramos felices cuando del luto te despojaste


El cuervo picotea con un extraño ruido el cristal
el impaciente tiempo me alcanza de nuevo
sonrió ante los recuerdos que pueblan mi mente
mi espíritu está feliz de haber viajado en tu alma
la estancia de tu presencia iluminada está
el dolor de la distancia en mi no tiene cabida
pues bajo tus letras he conocido
tu verdadera Navidad.



Xiomara Beatriz

martes, diciembre 20

Danza nuevamente la vida...


La taciturna lámpara arrulla con su luz mis letras
me voy entregado al poema bebiendo ávidamente de su esencia
como viviente pluma el se conduce en el acechante laberinto
la noche con su fanfarria a la pálida luna se muestra
el gato escapa con un discordante chillido
satura los rezos el templo
ángel de la alegría ven a esta región de muertos
vagones de angustia en ella transitan
fiebre de ávida glotonería  padecen…



Intento no caer en la trampa
cuando un burlón paisajista el esplendor del paraíso
en la tela sonriente empapa con perfecta claridad
hago caso omiso a los señuelos del sachet envenenado
mi corazón se ahoga en la melancolía
el mármol con su fría belleza le hace marco a la soledad
un gran ángel de bronce el tiempo espera
donde el amor no se invente…



La fatuidad con sus ajuares  de seda me acaricia
la natura con su inspiración me rescata
las húmedas brumas del pantano disipa
adivina mi ardiente corazón flotando entre turbias aguas
moribundo el fatuo mundo de mi se aleja
el ocaso y la aurora se juntan
me inclino ante su belleza
sobre mi vientre danza
nuevamente la vida …



Xiomara Beatriz