Surahbi Gupta.
En el
suburbio como una suave marea
los pájaros
cantan pues a la primavera suspiran
el azul
ahora corona los dedos desmelenados de los árboles
las
ventanas se quejan de sus descoloridos matices al amanecer
ondulan
como serpientes en el camino los ensueños
los
helechos perturban los balcones con sus lamentos
en los
pórticos descosidos por el sol con deleite juegan los niños
un rostro
desconocido me sonríe desde sus ojos distantes
El tremor
de los volcanes como alacranes al paisaje atosiga
mientras
bajo el reloj la ciudad es azotada sin clemencia
en la
esquina el miedo se escurre como un gato
la plaza
sofocada ante el engranaje de inquietos pies
divulga la
cicatriz del antiguo follaje que la habitó
acróbatas
sobre el pavimento suplican dádivas al finalizar
Me desligo
de la maraña del ambiente de la alameda
el
dobladillo del indescifrable universo en él me desliza
lo que
parece un gallo blanco, el cielo dorado fisura en su vuelo
las
ilusiones como palomas mensajeras fecundan las soledades
el bosque
de vocablos se despereza y como luciérnagas me buscan
alguien con
cabello de luna me toca con su aroma a canela
el viento
en éxtasis se sienta a pintar insospechados colores
la aurora
con su larga trenza en la orilla del negro río poetisa
el
mensajero dice que no me recuerda porque nunca me he ido
Un collar
de selva y montañas en su pecho se agita
su voz
retumba en el océano de sus labios de espejos
los álamos
de fuego destilan dulzura mientras caminan
el barullo
de amor me rodea con su escarlata alegría
una red
bordada de estrellas en su caracol me arrastra
La desnudez
de la mundanal existencia
se vuelve a
expresar en mi entorno
la mañana
no piensa ya como la que he dejado
se escuchan
de nuevo los reproches atrapar a sus presas
en la nariz
el aire rancio profana de nuevo los pulmones
una
encorvada testigo de antiguas épocas me zarandea
pidiendo
ayuda mientras el zumbido de coches
con
hambrienta desesperación forcejean sin decoro en la vía
la terraza
ya aparece con los pájaros de metal en su garganta
cautivando
con sus notas los espectros que esboza la tarde
gira y gira
mi alma queriendo en tus labios
probar de
nuevo el centelleante
estío.
Xiomara
Beatriz
8 comentarios:
De soledades fecundadas nacen las sensaciones entre álamos de fuego, el bosque de vocablos ya no asusta y reverdecen las ramas de los versos como el estío que promete labios y esplendores en la hierba...
Tu alma hermosa gira y gira...
Que espectáculo tan bonito...
Besos.
Me gusta tu canto , tu sencilla manera de hacer magia con las palabras .
TITULO Y TEXTO, MARAVILLOSOS!!
ABRAZOS
¡Hola! Me ha encantado la entrada, muy profundo, me gustaría que te pases por mi blog literario para ver qué te parece y si te gusta, quédate por favor. Te sigo !
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Un abrazo y muchísimas gracias.
Es tu forma de enseñar a dar amor lo que me hace inspirar a sentir tan cerca las estrellas que con tu mirada ases brillar una a una
Te mando muchos abrazos con mucho amor amiga eres un sol para mi corazón
Eres la fabula mas hermosa que que en mi corazon as escrito el cuento de adas que mi alma aun sueña
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