
No seré Shakespeare maravillando con su inigualable pluma el relato de lo acontecido entre sueños o realidades...Pero aun percibo el golpeteo fuerte del corazón…las destrezas de los movimientos de los cuerpos rozándose... apartando ramas y arrancando con avaricia la fruta del árbol prohibido...vistiéndonos de azul y plata como la luna… la noche nos regalo telarañas de emociones que nos hicieron girar vertiginosamente perdiendo la noción del tiempo …traspasando la barrera más allá del deseo… en medio de las palpitaciones que se perdieron en lo profundo del abismo de nuestros cuerpos.. Entre suspiros y gemidos al amamos sin prejuicio hambrientos de pasión para luego flotar en un mundo hermosamente neutral cuyo sol nos fue iluminado con el cálido resplandor de su ternura allí en ese mundo mágico donde se cruzaron las miradas mientras acaricio el dorso de tu mano es allí donde quiero quedarme pegadita a ti …alejados ya del viento rugiente de la pasión que barrio con nuestros cuerpos como tromba marina… ha llegado luego el silencio cómplice arropándonos con su candor…se me ilumina una sonrisa al recordar la escalera de la noche donde bajamos apresurados al pozo del deseo ataviados de estrellas … aun hilos de viva luz nos delatan mientras estamos en el lecho temblando con los brazos como alas de ave queriendo abarcar la aurora …dándole así énfasis al amor …si algo necesito ahora es quedarme allí pegadita a tu cintura envuelta en el manto de los sentimientos que afloran al traspasar la barrera del sol que conseguimos en cada encuentro…déjame allí pegadita a tu cintura ..Xiomara Beatriz