jueves, junio 28

Siempre dices adios...

Felicia Simion ...



Torbellinos de emociones es cada encuentro
nos absorbe la pasión en el antes vacío espectro
perdidos y olvidados
en la morada de la soledad
un día nos arrojaron
 con pólvora de versos en nuestros dedos
 nos arrullamos...




Como ave nocturna
 viniste murmurando un chocante dolor
abriéndote paso entre la multitud silente
recorrí aquellas sombras refugio de dardos
que como murciélagos a toda luz embestían
pero la trampa de tu risa escuche
y
volví a trazar
el oscuro poema... 


Sucedió que mi reflejo en ti descubrí
un teclado con música oculta en clave de sol
un alma en espiral
con caravana de sueños
bordados tercamente en las paredes
en un mundo de atroces metáforas
de rostros que son apenas bocetos
en medio de ese peregrinaje de siniestras profecías
mientras tus ojos y mis ojos se escuchan
vuelves a decirme adiós
en la rueda dentada de la vida…


Xiomara Beatriz  





lunes, junio 18

La manzana mordida...



Malcolm  Liepke 


El hambre de su esencia ansiaba
ávidos  se devoran
desquicios de suspiros
la pared empapela
la lujuria echa raíces
el corredor de suave tinieblas
se embriaga de fecundos aromas...


Xiomara Beatriz

miércoles, junio 13

En el ámbar de la memoria….




Cesc Ginesta...


En memoria del pintor y compañero virtual Cesc Ginesta / A la memòria del pintor i company virtual Cesc Ginesta...



 El roció bautiza la hierba
crepita el sol en la mañana
los sonidos de los sueños se alejan
se enciende la lámpara de esta realidad
mientras se hunden otras que germinan sin cesar  …


Las ondas de luz traspasa el frondoso  árbol
rebela el esplendor de las nuevas vestiduras
el ave se descuelga de su rama al escuchar
la música inevitable que entona la existencia
murmullo de las cosechas que surgen por doquier
el rio negro brota colmado de sentimientos
e iluminan las palabras con su perfume adictivo…

  
Las cambiantes luces se reconocen en el estrecho pasillo
algunas se detienen observan los hilos que nos se ven
se refrescan en los nuevos matices ocultos por el bosque
no hay hoja solitaria el viento la acompaña
el tiempo implacable proyecta su sombra
se comienza segar de nuevo las espigas 
el sinuoso y suave atavió de la eternidad
resplandece ahora en el ámbar
de la memoria …

Xiomara Beatriz .