miércoles, febrero 10

Ojos profundos hechos astros…

                                                                    Cali Rezo

Cuando aun adormilada...punzándome las sensaciones del despertar....abro mis ojos a una realidad... al principio extraña se forman de nuevo las palabras que ahora necesitan ser vocalizadas… pues en otras lúdicas realidades son burbujas que se lanzan para ser descifradas al instante…joyeros escondidos en los mares aguardan aun ser descubiertos…destellando facetas de la luz desconocidas…sol sin identidad que nos arrancan de las tinieblas

Ojos profundos hechos de astros… cuerpos de éter desechan las prisiones del cuerpo…viajando a los nuevos horizontes que comienzan a plasmar nuevos lienzos…colores nunca inventados son creados en silencio…secretos que ansiados oídos intentan escucharlos como canticos sagrados
pues desean racionalizar el pensamiento…conocer con palabras lo que solo el corazón y el alma pueden percibir

Tocar con los dedos los sueños no se puede pues desnudos están de toda materia
la fuente hierve…vive dentro de cada uno buscando brotar llegar a la orilla como las olas del mar necesita ser escuchada…el camino es simple abrazar el amor sin límites… es sacudir la insensata furia lejos del corazón…multiplicidad de iluminación provocan las loables acciones izando una nueva bandera…aunque muchas veces nos sentemos en la mesa de la sórdida casa bebiendo el embrutecedor vino del ego…

En las profundidades hay una verdad resistente como el bambú y el alma vuelve a desplegarse con la humildad del loto que aun en medio del pantano sale a flote con la inigualable belleza que el universo siempre nos ha prometido.

Xiomara Beatriz

martes, febrero 9

Todo pende de un hilo...





Una bandada de papagayos atraviesa la isla con sorpresa irrumpiendo la mañana…el sol colgado las mira al igual que mis ojos retorcidos de alegría…las costas braman por los fuertes vientos haciendo ulular las ventanas contra la madera que las aloja con perfecta simetría…la calidez vuele a apoderarse del pueblo …ya soplan vientos de primavera …en los arboles revientan los cogollos enjoyando sus ramas…las copas se comienzan a tapizar de flores …es tiempo de reconquista donde el verdor asume su papel protagonista …hermosas alfombras alojan las vacas y encima de ellas picotean las garzas…mirando el horizonte donde el cielo y el mar vuelven a encontrarse me deslumbro de encontrarme allí…cerca del muelle donde se desvisten los barcos posando su carga en la orilla donde la esperan brazos ansiosos queriendo ser tranvía…

La vida siempre te da a percibir las dos caras de la mano el dorso o la palma…la rosa de los vientos busca un balcón para siempre pernoctar…el espíritu danzante del amor reparte sus semillas en la naturaleza…mirar cómo se esparce enciende el corazón…imposible creer que el amor no exista es evidente mas sin embargo es la sombra del egoísmo la que lo ensombrecen …a quien?... esta vez el amor despertara con epístolas en el resquicio de la ventana pues el destino travieso tiene esa costumbre de sorprender con la llama a dos corazones que buscan imitar a los dioses …la enamorada siempre transita entre las acacias perfumadas hacia la gruta donde como ofrenda lo espera…sus labios como lirios rojos virginales van musitando el nombre de su amado…la luna le muestra el sendero lleno de pétalos homenajeando el amor contemplado…en los arbustos gardenias con dulzuras sobresalen la cuidan de las zarzas que con envidia despuntan queriendo alcanzar su carne para herirla…

El trepa la sierra como lobo hambriento buscando su doncella pues sabe que en la gruta encontrara la primavera y un aullido de alegría estremecerá sus corazón al encontrase de nuevo…él mientras lavara el cuerpo de su amada antes de la ofrenda con caricias repetidas …se susurrara los te quiero con delirio ardiente…la luna con sus rayos intenta colarse pero los amantes ya no huyen la reciben para alumbrar sus cuerpos en la hermosa pradera que recorren los dedos...los húmedos labios se agitan en travieso juego…despertando tormentas en la piel… la vorágine se va escuchando cuando el raudal de la pasión que los recorre como ríos salvajes transita en sus cuerpos mientras voces gimen al percibir sacudiéndose los sentidos…los montes conquistados por el corazón amado provoca al unisonó con el causante de la placentera sinfonía del amor de primavera
Xiomara Beatriz

domingo, febrero 7

El Columpio…


A veces es en los sueños donde atónito el corazón reconoce el susurro de otras realidades, quizás no dormimos sino nos movemos dejando la pesada vestidura carnal. Sentada en la silla cavilando sobre el papel en blanco mientras la pluma inquieta, cantar quiere con vocablos danzantes sobre sueños que se columpian entre varios mundos. Como una niña voy columpiándome veo el rápido transcurrir entre el pasado y el futuro. Mientras sigo meciéndome desde el presente y debajo gira y gira el mundo.

Veo ejércitos que avanzan enseñando un lenguaje nuevo en el universo, nada podrá sofocar la inextinguible llama mientras himnos se cantaran para espantar los cuervos que pretendan arrebatarnos los nuevos tiempos. Letras fueron escritas antes que en los bosques los aullidos fueran escuchados y en los mares comenzará  a hervir la vida, los antes lóbregos del invierno serán cercenados por las espadas de luz que están rasgando la niebla. Los ojos permanecerán secos a las angustias, los oleajes dolorosos morirá como el ocaso. Las horas de la soledad se extinguirán en los ojos amados, la eterna propagación del amor será realidad de vida. Lluvias de estrellas caen en dorso de la mano para ser sopladas formando nuevas galaxias, el agua sigue repiqueteando sin respiro mientras la brisa me mueve adelante y atrás. Fluctuando a veces entre la espesa bruma, otras con la claridad de los limpios cristales. Sueño y sonrió al tener certeza el nuevo despertar entre los espíritus de auroras.

El amanecer impaciente me trae de vuelta con la misma dulzura que me llevo la noche, vapores de conciencia ahora dudan. Me digo siempre tengo locos sueños sobre aves, ríos, céfiros, amor, arcoíris y viajes en la cola de las estrellas o quizás no sean tan solo sueños, sino susurros del universo.


Xiomara Beatriz