sábado, septiembre 4

Detrás de la fachada solo queda el alma...


Siegfried Zademack

En las piernas descansa el boceto
las suaves líneas de claros y oscuros
que hacen gemir su mundo
escondida ave que a su encuentro quiere venir
cuando el azul se cuaja en la sosegada sombra
la lluvia acude por el ausente fantasma
de impenetrable caparazón...



Los cielos suspiran en el ventanal
el enigma de florecidos sueños
pero cambiantes aguas hacen de ellos
una trágica comedia como buitre
va engullendo el corazón...


En la mano la copa de rojos frutos amargos
como antiguo amante quiere incendiar las venas
pero navega por desiertos que lo desprecian
noche de verano es inútil sin amor...


En el borde del vivir el cielo destella intacto de su luz
reconoce el desconsuelo en las hojas marchitas
envía la brisa para alejar el eclipse lunar
llega ...retoza...besa en silencio
las vagabundas lagrimas...


La diosa abandona el claro espejo
entrando a la distorsionada vida
un arroyo le encumbra
con encantador murmullo
a seguir siendo regocijo
ser amor que acaricia
mientras en este mundo gire
a él no se integrara nunca
por eso cuando duerme
viaja a su hogar
allá a lo lejos
en el desván
de las estrellas...

Xiomara Beatriz