jueves, marzo 25

Mientras no estás….


pintura de Danielle Richard

Mientras no estas se sacuden las doradas espigas entre lo viejo y nuevo que arrastra el viento…el verde se despierta de la tristeza del invierno dando paso a la primavera…la naciente mañana le es difícil no gritar la alegría mientras el viento sacude las espigas...el mar está en reposo …ráfagas de colores emergen desde el secreto jardín…mientras no estás… noches… auroras … pasiones …frustraciones …amores … …palabras …alegrías …juramentos… angustias …falsedad …alegrías …brotan en el pueblo… todo transcurren sin reprimirse …


Mientras aquí rezagada estoy flotando en mis propios pensamientos como lago calmo lejos de la muchedumbre …tu voz canta versos como quien regala flores …amarantos de esplendores perfuman los altares del alma…te amo sin remedio …como el bote que el agua transporta sutilmente con caricia de rebosante dulzura …a lo lejos en la laguna …el azul vibra sus propias melodías de vida … los pájaros por millar llegan …hacen nido y emigran…los lirios son campanas que se agitan al paso de sus alas …ríos penetran sus bosques de manglares…mientras los reptiles son acunados en su vientre …de la flor es el capullo donde palpita la existencia símbolo de la grandeza de la naturaleza…


Como una amapola en la arena vestida de blanco respiro del mar su oxigeno …del aliento de todo lo que me rodea …de los sueño que como las gaviotas ahora surcan alegremente el firmamento…del sonrojo de los cielos en el alba …de los grises de algunas nubes que quieren traviesamente vagabundear en el soleado día….de tu sonrisa remota…del rezo que surge en inocentes labios… del roció de los ojos cuando no llegan a tocar sus sueños…de los pies que se hunden en el sesgo de la peregrinación…de las asfódelos que se tiñe de escarlata cuando arden de pasión al cruzar con la danza de los pensamientos los olivos que pueblan tu tierra …pienso en ti mordisqueando la savia de una rama que sostengo en los labios …mis labios que como brotes de rojas amapolas están queriendo sentir tu cálido aliento sobre ellos para sentirlos florecer algún día …

Xiomara Beatriz