viernes, noviembre 6

Sera simplemente amor ...


En este otoño lluvioso donde el cielo no deja de llorar…mi alma vagabunda pernocta en esa alma que al mirarla me hechiza con su extraño proceder…su voz ahoga mis palabras perdida entre sus versos…Levantó vuelo para sentirme mujer liberada de mi faceta carnal pues no quiero ser la manzana que seduce con su dulce néctar… que busco? La eternidad de un amor quimera igual que pretender que el mar siempre esté soleado…necesito tumbar mi cuerpo en la orilla de su mar con la mirada fija en el cielo buscado poseer la fugaz estrella que a mis inciertos ensueños con su poder hechizante con tiempo se ha apoderado...exhalo suspiros para no ser ahogada con lo que siente mi corazón antes plagado de soledades ahora pretendiendo reinar en valles de incertidumbre acompañada angustiosamente por el silencio …deseo exiliar el delirio y el fuego que consume sin compasión… corazón loco que piensa que es conocedor de asuntos de humanos y en la tonta trampa ha resbalado a pesar de todo conocimiento que por la borda lo ha echado.

Solo quiero ser palabras que a él con perfección ha delineado…ser caricia…ser gemido…ser aliento que lo turbe con mis palabras...fluye el tiempo por el cauce del rio de la agonía …es que acaso el tonto se engaña cantando melodía de esperanza… de imposibles ilusiones que hace de la espera interminables de noches que con afán se alargan …la tarde se torna lenta ha sido conquistada de ausencias resecando la piel …víctima soy de las tenebrosas noches en las que quisiera haberlo acunado en mis brazos …no sé cuántas lunas …no sé cuántos soles …ni sé cuántas horas faltan por verle de nuevo ….solo le digo que por sus palabras revoloteo grabándose una a una en mi memoria aunque él ni se entere … que mi pecho aun se aferra a la esperanza del tiempo plagándolos de estrellas envueltos en cielos de quimeras…ahora el reloj transcurre sin piedad quizás porque tengo urgencia de leerle ... tengo miedo de tener urgencia de amarle y que esto que siento se llame simplemente amor…Xiomara Beatriz