sábado, noviembre 21

Hipnosis ….



La tarde se hunde con serenidad arrojando agónicos pero placenteros rayos rojizos …pardos …naranjas… dorados que se escurren en el cielo gris azulado con algunas nubes en forma de zigzag que se niegan a abandonar el cielo mientras la noche se cuela arrogante …van parpadeando en el horizonte precarias estrellas que se vislumbra a lo lejos atrapando mi atención …pienso que no hay colinas …montañas en cuyas cumbres siempre habita un aro de niebla semejando ángeles protectores … me sobrecoge saberlas tan lejanas…me invade el frio de la nostalgia…me veo en el espejo apenas iluminado me topo con mi reflejo …aliso mis cabellos …subordinado cuerpo donde mi alma retumba pienso que saldré pronto a la calle a su ruido a su devenir agitado de fin de semana…A veces me gustaría ser ave para viajar en vuelo silencioso que no acalle por eso la danza de devoradora pasión que encuentra en mí el caudal perfecto…mi corazón de seguro profanaría el silencio al sentir tu olor carnal ...buscaría disfrutar ese tiempo como manjar lento de divinidades… sentirme quizás como hilos de estrella que perforan tu cuerpo para sutilmente invadir tu alma ….o pez vagando hipnotizado por los colores que del manglar se emana incitándote a vagar por las islas hundidas o en los dardos a punto de disparar sobre el arpón de fuego para consumirte con suavidad ó ardor no lo sé con certeza pues voy curiosamente danzando entre la forma un poco hibrida del licántropo que todo devora y el hechizo vampírico sucumbiendo a la dulce tentación de deambular solo por tu cuello ….también incluso querría un día llegar a convertirme en poetisa dejándome llevar por todo lo que siento desde el sentimiento de vida que me provocas hasta la sensación de pequeña muerte cuando te alejas … que a todo le encuentre verso…que tu piel sea papiro viviente donde con paciencia los bosquejaría para luego llegar a ensamblar allí un poema …el mundo muchas veces me parece una nave húmeda plena de selva… riachuelos …pájaros que cantan otras a veces se cansa uno de verse sola como desierto… pero sé que siempre aun en los más áridos días infértiles dentro de mí se encuentra un oasis donde beberé siempre que este sedienta del agua fresca …el tiempo merma y el golpeteo de la fina lluvia que resbala en la ventana avisa que debo salir de la hipnosis que me provoca pensar en ti…Xiomara Beatriz

2 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Besos hipnotizados Xiomara.

Anónimo dijo...

Por los papiros vivientes de la piel escribimos extraños jeroglíficos. Transitamos la vida de las muertes horizontales. Con sábanas de abrazos nos embalsamamos para permanecer incorruptibles en la eternidad del instante. Leemos el libro de los muertos y de los vivos en el reflejo luminoso de nuestras miradas. Efímeros, pero cíclicos, como las crecidas del Nilo, inundamos territorios inexplorados del alma, esa alma-energía que puede que ya existiera un segundo después de la gran explosión. Tan antiguos y tan nuevos somos, átomos fusionados que forman el aire, el agua, la tierra y el fuego...